Áreas especializadas de A. Latina buscan alianzas para aprovechar los tratados de libre comercio.
La firma de los tratados de libre comercio por parte de los países de América
Latina ha potencializado el rol de las zonas francas como plataformas ideales de
exportación e importación de bienes y servicios, y se convierte en el mecanismo
ideal para beneficiarse de los requisitos exigidos en los TLC.
Si bien estos acuerdos comerciales les brindan a los países firmantes
condiciones de acceso preferencial a los mercados, estos beneficios se
potencializan cuando las empresas están ubicadas en las zonas francas.
Conscientes de esto, 19 de las principales zonas francas de América Latina,
agremiadas en la Asociación de Zonas Francas de las Américas (AZFA), decidieron
lanzar una alianza estratégica para permitirles a sus usuarios llegar de la
forma más competitiva a sus mercados de destino.
Con esta alianza, un empresario ubicado en un país que no tenga TLC puede
exportar parte de su producto a una zona franca de Colombia sin tener que pagar
la nacionalización del producto, transformarlo para obtener el origen colombiano
como parte de la cadena de producción del mismo, y reexportarlo a un país con el
cual Colombia tenga un tratado de libre comercio, explica Jorge Alberto Díaz
Rivera, director ejecutivo de la AZFA.
“Si el empresario no está en zona franca, pierde competitividad porque
tendría que pagar los aranceles en el país donde va a hacer la
transformación.
Además, no obtiene los beneficios en IVA, arancel y renta que tienen estas
áreas de excepción”.
Aunque el régimen franco comparte características similares, no es igual en
todos los países.
Por esta razón, en la alianza se estudiarán las reglamentaciones para poder
proyectar a los usuarios la mayor cantidad de beneficios de acuerdo con las
ventajas competitivas en legislación, recurso humano e incentivos de cada
país.
Para Juan Pablo Rivera, presidente de AZFA, una de las grandes ventajas de la
alianza será la creación de clústeres de complementación industrial, los cuales
permitirán beneficiarse de toda una cadena de producción al interior de las
zonas francas y de la acumulación de origen.
Por su parte, Martín Gustavo Ibarra, presidente honorario de AZFA, recalcó el
gran potencial de las zonas francas en Colombia como herramientas de la nueva
tendencia de la relocalización de empresas chinas para acceder al mercado
americano y europeo, entre otros.
MÁS QUE BIENES
El potencial de las zonas francas va más allá de la producción de
manufacturas.
La exportación de servicios se ha convertido en un foco estratégico de estas
áreas de excepción, que ofrecen servicios de call center, business process
outsourcing y knowledge process outsourcing, todos grandes generadoras de
empleo.
De hecho, las nuevas zonas francas en Colombia buscan adecuar espacios
específicos para este tipo de negocios que también cuentan con beneficios en
IVA, renta y aranceles.
Aunque no hay cálculos al respecto, se espera que estas cifras tengan un gran
dinamismo gracias al Tratado con los Estados Unidos.
“Las zonas francas son indispensables dentro de un comercio mundial ágil,
eficiente que genera empleo, réditos para el gobierno y tiene impacto positivo
en nivel social”, señala Jorge Alberto Díaz Rivera.
IMPACTO EN LA ECONOMÍA
Las Zonas Francas generan 47.163 empleos directos y 97.363 empleos
indirectos, y cobijan a 600 empresas.
Además, se han convertido en destinos predilectos de inversión extranjera
directa con montos de 7.036 millones de dólares entre zonas Francas Permanentes
y Permanentes especiales, es decir, las uniempresariales.