Aunque el país exportó a mayo más de US$3.000 millones, están concentrados en pocos productos.
Con excepción de tres productos, las exportaciones colombianas a los 27
países miembros de la Unión Europea apenas se asemejan a las realizadas al
vecino Venezuela, donde, a pesar de las dificultades de acceso a ese mercado,
entre enero y mayo de este año, las ventas de artículos nacionales rondaron los
1.000 millones de dólares.
Según las cifras del Dane, los despachos efectuados a la UE en los primeros
cinco meses del presente año, sin incluir combustibles, café y frutos
(especialmente banano), son de aproximadamente 1.500 millones de dólares.
Es más, los datos reflejan un descenso en la colocación de productos
diferentes a hidrocarburos, café y frutas. De las 27 naciones que conforman el
bloque, 19 de ellas registraron caídas en las compras de productos
colombianos.
Este panorama es el que muestra la realidad de los despachos de Colombia y la
Unión Europea, a pocos meses de la entrada en vigencia del tratado de libre
comercio, prevista para el 2013, según lo confirmó a Portafolio el ministro de
Comercio Exterior, Sergio Díaz-Granados.
En concepto del funcionario, aunque el acuerdo podría ser aprobado en octubre
de este año en el Congreso de Colombia y el Parlamento Europeo, es necesario
someterlo al examen de la Corte Constitucional a nivel local, mientras que en la
contraparte se requiere el aval de los congresos de cada país miembro, por
tratarse de un acuerdo de carácter mixto.
“En el mejor de los casos, este TLC entrará en vigor a comienzos del próximo
año”, dijo Díaz-Granados.
Añadió que esto se daría, incluso, si se determinara la anticipación de la
entrada en vigencia del acuerdo de manera provisional, mientras se somete al
análisis de los congresos de los países que integran la UE.
Respecto al bajo nivel de exportaciones colombianas a la Unión Europea, los
expertos aseguran que el problema radica en la falta de oferta exportable por
parte de Colombia, situación que también ha sido señalada como la causa del
lento despegue del intercambio con Estados Unidos y Canadá, a pesar de que los
tratados con esos países ya entraron en vigor.
El presidente de la Asociación Nacional de Comercio Exterior (Analdex),
Javier Díaz, sostiene que nada saca el país con seguir firmando tratados de
libre comercio si no se define una política productiva para aumentar la oferta
exportable.
Por su parte, el decano de la Facultad de Ciencias Económicas de la
Universidad Nacional, José Guillermo García, coincide con esta apreciación e
indica que el país no está preparado para sacarles provecho a los tratados
porque no hay una masa crítica de productos que genere beneficios.
Sin embargo, el Ministro Díaz-Granados sostiene que la idea es crear las
condiciones para abrir más mercados.
“Esto se logra con el establecimiento de nuevas reglas que faciliten el
acceso a más compradores”.
EL TLC REACTIVARÍA EL COMERCIO
De los 20 productos colombianos que más compran los países europeos, la mitad
registró valores inferiores a 60 millones de dólares durante el periodo
enero-mayo del presente año.
Sin embargo, el Gobierno considera que el tratado de libre comercio abre un
gran potencial a productos agropecuarios, confecciones y plásticos, lo que
contribuirá a incrementar el intercambio comercial.
El Ministro de Comercio, Sergio Díaz-Granados, afirma que el país “no puede
olvidar que este acuerdo no se refiere exclusivamente al comercio de productos,
sino que tiene un capítulo muy importante de inversión, de la cual Colombia se
beneficiará considerablemente en los próximos años”.